martes, 11 de marzo de 2008

La Vida es un Juego de Póker


Desde que llegamos al mundo, hemos empezado a jugar un juego de Póker.

La vida lanzó las cartas, y cada uno de nosotros recibió las que le tocaban. Algunos recibieron cartas excelentes, cartas que pusieron una sonrisa en sus rostros. Otros no tuvieron la misma suerte, y recibieron las cartas que no querían. Otros se frustraron al ver lo recibido.
Luego viene la primera ronda.
La vida nos ofrece cambiar cartas. Algunos aceptan, mientras otros prefieren quedarse con las suyas. Las apuestas van y vienen, logrando amedrentar a algunos jugadores, que se retiran sin haber probado suerte. Otros, más valientes, confían en sus decisiones y se aventuran a continuar.
Entonces viene el final del juego, el momento de mostrar las cartas.

Sólo es allí, al final, cuando podremos darnos cuenta de si nos quedamos con las cartas indicadas, y descubrir si hicimos la jugada correcta.

Eso mismo ocurre en la vida. La única diferencia, es que en el póker sólo hay un ganador; en la vida, depende de cada jugador el considerarse vencedor.




Yo ya jugué mis cartas; ¿jugaste ya las tuyas?

4 comentarios:

Lu♪ dijo...

Hola Maida!
Primero que nada quiero decir que me encanta tu blog ^^ tenes muuucha razon en las cosas que escribis, y estan realmente muy bien elaboradas...

Yo todavia no jugue mis cartas. Aun no es el momento adecuado. Las personas en la mesa piensan que tengo cartas totalmente distintas a las que en realidad tengo. Hay gente que ya ha mostrado sus cartas, otras personas que se han retirado... pero aun no han logrado ver nada mio.

RAMPY dijo...

y Yo pensaba que había hecho muchos símiles comparando a la vida con algo, pero nunca se me había ocurrido compararla a un juego de cartas. Muy bueno tu comentario
Un saludo.

Paco dijo...

Hola

Estoy completamente de acuerdo. Hay gente que no hace mas que descartarse de las cartas y no intenta jugarlas pensando que se merece solo un repoker de ases. Si nos vienen malas cartas hay que mirar el mazo. Si quedan pocas o salieron muchas buenas, es posible que tengamos que elaborar nuestra jugada con las que tenemos. Ahora está en nuestra mano el saber hacer valer al máximo esa pareja de doses que nadie sabe que tenemos. Si jugamos nuestras cartas bien, es posible que ganemos la mano, pero somos nosotros quienes tenemos que luchar por ello. Nadie va a jugar nuestras cartas.
Un abrazo y sigue asi.

Paco

Carlos M dijo...

Saludos Maida desde PR..! Me encantó como comparaste la vida a un juego de póker, yo desde que oí la frase por primera vez así también lo creí, pero me gusto mucho como la desarrollaste y expusiste en letras..!Mucho éxito..!