Las Nuevas Tribus Urbanas

Hoy quiero seguir desarrollando el tema de mi última entrada, pues como bien dijo una querida amiga mía, un tema como aquel es muy amplio. Demasiado amplio para un solo día de desarrollo.

Mi idea iba en que la gente se olvida de sí misma, con tal de poder encajar en la sociedad actual. Y mencioné el caso de la gran cantidad de Tribus Urbanas que existen hoy en día. ¿A qué se debe la gran cantidad de ellas que existen en estos días? A un estrechamiento de mente, a una disminución en las cualidades de aceptación. El mundo cada vez se vuelve más cerrado; cada día la gente transita más pendiente del reloj. Y cada día, con la masificación del Internet, es mayor el riesgo de ser humillado. Pues ahora aquel ser solitario no es sólo rechazado en su ambiente; puede también ser humillado cibernéticamente, lo que equivale a mundialmente. ¿Qué es lo que hacen entonces para defenderse, todos aquellos seres olvidados? Ocultarse bajo una masa de gente que comparte un mismo estilo de vestimenta, pensamiento, música. Ocultarse bajo las Tribus Urbanas.

Es por eso que no se puede culpar a los jóvenes cuando crean nuevas Tribus Urbanas, ni criticárseles por que éstas ya no sean como las de antes. Pues tal como hoy mencionaba mi Rector, hace cuarenta años cada grupo que surgía cultivaba una filosofía, un estilo de vida más allá de la vestimenta, que luchaba por defender frente a toda una sociedad de oscuros ojos. Hoy en día es tanta la gente que busca refugiarse en ellas, que ya no es necesaria la filosofía ni la ética para que aparezca una nueva Tribu. Basta con que surja un nuevo estilo de música.

Pero sin los valores morales, nada puede sobrevivir. Como cualquier moda, estas Nuevas Tribus Urbanas terminarán por acabar.
Yo no les doy más de unos cuantos años.